El día anterior lo pasamos visitando Nara, Uji y Fushimi Inari, así que este día continuaríamos visitando Kioto. Como aún no sabíamos lo que haríamos el resto de días que íbamos a pasar en esta ciudad, este día decidimos ver las cosas que teníamos marcadas como imprescindibles y que no habíamos tenido tiempo de ver el primer día.
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Castillo Nijo
Como teníamos el itinerario apretado, decidimos ir en taxi al Castillo Nijo para ahorrar tiempo. De esta forma, en 10 minutos estábamos en el castillo.
También podíamos haber cogido el metro, línea verde, Karasuma Line, en la estación de Kioto, que estaba al lado de nuestro hotel, para llegar en unos 30 minutos al castillo, pero preferimos ahorrar todo el tiempo posible, ¡que teníamos el itinerario apretado!.
Información para visitar el Castillo Nijo:
Horario: de 8:45 a 17:00 (última entrada a las 16:00). Cierra los martes.
Precio: 600 JPY (+ 400 JPY por entrar al Palacio Ninomaru).
El castillo Nijo, residencia de los shogunes Tokugawa en Kioto, es uno de los 17 Monumentos Históricos de Kioto declarados como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Puedes comprar solamente la entrada al recinto, que te permitirá ver los edificios por fuera y los preciosos jardines, o bien puedes comprar la entrada completa, que te dará acceso también al Palacio Ninomaru.
Yo te recomiendo que compres la entrada completa, porque el interior del Palacio es muy bonito y merece la pena.
En el interior del Palacio, además de poder admirar los biombos decorados con una gran variedad de motivos, podrás probar el «suelo de ruiseñor», que cruje cuando caminas sobre él. Este tipo de suelo se utilizaba para alertar a los guardas de la presencia de intrusos en el Palacio.
Ten en cuenta que en el interior del Palacio no está permitido sacar fotos.
Tras visitar el interior del Palacio, estuvimos un buen rato paseando por los jardines, que están llenos de rincones increíbles, como el de la foto.
Los jardines, de estilo japonés, cuentan con un estanque y rocas ornamentales, entre otras cosas.
Templo Kinkakuji
Después de ver el Castillo Nijo, decidimos coger otro taxi para ir a visitar el Templo Kinkakuji, conocido popularmente como el Templo Dorado.
Podíamos haber ido caminando, pero se tardan unos 50 minutos, y no teníamos ganas de ponernos a mirar la línea de autobús que teníamos que coger, así que fuimos en taxi para ahorrar tiempo y complicaciones.
Información para visitar el Templo Kinkakuji:
Horario: de 9:00 a 17:00.
Precio: 400 JPY.
Aunque se conoce desde hace años como Kinkaku-ji o Templo Dorado, el nombre oficial del templo es Rokouon-ji. Se contruyó en el año 1397 como villa de descanso del shogun Ashikaga Yoshimitsu durante sus visitas a Kioto. Posteriormente se convirtió en un templo zen de la secta Rinzai en 1408, tras la muerte del shogun.
Las paredes exteriores de las dos plantas superiores están recubiertas con pan de oro, y por eso se le conoce como el Templo Dorado. Está designado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1994 y es también Monumento Histórico de la antigua Kioto.
El edificio actual es una reconstrucción del año 1955, ya que el original fue destruido por un incendio provocado por un monje. Puedes leer sobre este tema en la obra «El Pabellón de Oro», de Yukio Mishima.
El Templo Kinkakuji es uno de los templos más visitados de Kioto, así que conviene ir a primera hora para evitar que esté a rebosar de gente.
A nosotros no nos encajó hacer la visita a primera hora y llegamos al templo a media mañana, pero aunque había bastante gente, no era una cosa exagerada que impidiera disfrutar del recinto y sacar fotos a tutiplén.
El interior del templo no se puede visitar, pero las vistas exteriores, del templo y su reflejo en el lago no te dejarán indiferente.
El recinto tiene un itinerario designado para dar la vuelta al lago y ver el templo desde todas las perspectivas, aunque para mi gusto las mejores vistas son justo al principio del recorrido.
Al final del recorrido, además de poder ver el templo desde muy cerca, puedes visitar la casa del té, donde podrás tomar un té verde por 500 JPY.
Santuario Kitano Tenmangu
Tras hacer un montón de fotos del Kinkakuji desde todos los ángulos, decidimos ir caminando hasta el Santuario Kitano Tenmangu, que está a 15 minutos más o menos del Kinkakuji. Además, nos pillaba de camino para coger el tren Randen hacia nuestro próximo destino: Arashiyama.
Información para visitar el Santuario Kitano Tenmangu:
Horario: de 5:00 a 18:00.
Precio: gratis.
El Santuario Kitano Tenmangu, construido en el año 947, se erigió en honor del político, poeta y estudioso Sugawara Michizane. que fue exiliado injustamente por razones políticas por el clan Fujiwara. La leyenda atribuye al espíritu vengador de este estudioso varios desastres naturales como plagas, tormentas o terremotos.
El Santuario Kitano Tenmangu, aunque no es uno de los templos más conocidos de la ciudad, es muy bonito. Y además ¡es gratis!.
En el Santuario Kitano Tenmangu podrás encontrar numerosas estatuas de bueyes por todo el recinto. Estas estatuas representan a Ushi-san, uno de los anteriores dioses del santuario. También están relacionadas con Sugawara Michizane, porque cuenta la leyenda que el día de su muerte, un buey murió tirando del ataúd.
Se cree que tocar las esculturas de bueyes que hay en el santuario, te traerá buena suerte, salud y éxito en los estudios.
El recinto del Santuario Kitano Tenmangu es bastante grande, aunque no se puede entrar en ninguno de sus edificios.
Si quieres ir en autobús, los autobuses 101 y 102 paran en este santuario. La parada se llama Kitano Tenmangu.
El edificio principal tiene unos faroles muy bonitos.
Arashiyama
Tras visitar el Santuario Kitano Tenmangu, nos dirigimos a la estación de tren Kitano Hakubaicho, para coger el tren Randen hacia el barrio de Arashiyama, en las afueras de Kioto.
Para llegar hasta Arashiyama hay varias alternativas, pero a nosotros la que mejor nos encajaba con el itinerario de ese día era coger el Randen.
En su web oficial puedes ver como llegar con el Randen a Arashiyama.
Lo más conocido de Arashiyama es su famoso bosque de bambú, pero en realidad Arashiyama da para un día completo si quieres visitar todos sus templos.
Nosotros, como llegamos por la tarde, nos centramos en visitar el templo Tenryu-ji, que es el más conocido de la zona, y por supuesto el bosque de bambú.
Templo Tenryu-ji
El Templo Tenryu-ji, uno de los cinco templos zen más grandes de Kioto y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, está casi al lado de la estación de tren Randen de Arashiyama, así que llegamos en unos pocos minutos.
Información para visitar el Templo Tenryu-ji:
Horario: de 8:30 a 17:30.
Precio: 500 JPY por entrar al recinto + 300 JPY para entrar al interior de los edificios.
En esta ocasión, decidimos comprar solo la entrada al recinto para visitar los jardines, que habíamos leído que era lo más bonito del templo.
El Templo Tenryuji, cuyo nombre significa “Templo Celestial del Dragón”, es un templo budista zen de la secta Rinzai. Fue construido en 1339 por el shogun Takauji, que lo hizo para homenajear al emperador Go-Daigo que acababa de morir.
El templo es fundamentalmente famoso por sus jardines, diseñados por el paisajista y arquitecto Muso.
Aunque los edificios del recinto se han reconstruido varias veces por los daños sufridos en guerras e incendios, los jardines son los originales.
Hay varios senderos que recorren los jardines y permiten ver todos sus rincones, con árboles de todo tipo y bonitas lámparas de piedra.
Bosque de Bambú de Arashiyama
El Templo Tenryuji tiene salida directa al bosque de bambú de Arashiyama, así que cuando terminamos la visita a los jardines nos fuimos directamente al bosque de bambú.
Información para visitar el Bosque de Bambú de Arashiyama:
Horario: está abierto 24h.
Precio: gratis.
El bosque de bambú de Arashiyama es uno de los sitios más famosos de Kioto, así que siempre está lleno de turistas.
A pesar de ello, si tienes un poco de paciencia no es difícil sacar fotos sin gente.
En realidad el bosque de bambú es bastante pequeño, se recorre en un momento. Pero como lo normal es pararse a hacer 1000 fotos, hay que reservar una horita para verlo con calma.
Gion
Después de fotografiar todos los rincones del bosque de bambú, ya estaba atardeciendo, así que decidimos ir al barrio de Gion a ver si teníamos suerte y veíamos alguna geisha.
Para ello, cogimos un autobús en Arashiyama, que nos dejó en Gion en algo menos de una hora.
Aunque hay más barrios de geishas en Kioto, Gion es el más conocido, y por tanto el más turístico. Todos los edificios del barrio son de madera de dos alturas y están perfectamente conservados.
Recomiendan acercarse sobre las 18:00, que es la hora en la que las geishas empiezan a moverse por la zona.
Nosotros estuvimos un buen rato dando vueltas por la zona, pero ¡no vimos ni una sola geisha!.
Santuario Yasaka
Cuando nos cansamos de dar vueltas buscando geishas, nos dirigimos al Santuario Yasaka, que está también en el barrio de Gion.
Información para visitar el Santuario Yasaka:
Horario: abierto 24 horas.
Precio: gratis.
El Santuario Yasaka, construido en el año 656, es un santuario sintoísta, que se diferencia de los demás en que no tiene torii en la entrada.
En 1871 fue designado Kenpei Taisha, que quiere decir que es el santuario que cuenta con el mayor apoyo del gobierno japonés.
Lo más bonito del santuario es ver sus faroles iluminados.
Te recomiendo que lo visites por la noche, así podrás verlo iluminado, que es mucho más bonito.
Pontocho
Después del Santuario Yasaka, nos dirigimos a visitar el callejón de Pontocho, colindante al barrio de Gion.
Al igual que Gion, Pontocho también es mejor visitarlo por la noche.
En Pontocho fundamentalmente lo que encontrarás son restaurantes con vistas al río Kamo y Gion, y bonitos farolillos iluminados. Es un buen sitio para cenar o tomar algo.
Hay quien dice que aquí también se pueden encontrar geishas, nosotros tampoco vimos ninguna. ¡No era nuestro día de suerte!.
Y tras el paseo nocturno por Gion y Pontocho nos volvimos al hotel a descansar para el día siguiente.
Aún no teníamos claro si al día siguiente íbamos a seguir visitando más templos en Kioto o si iríamos a visitar algún sitio de los alrededores. Dejamos la decisión para la mañana siguiente.
Recursos para preparar tu visita a Kioto:
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Web oficial del tren Randen para ir a Arashiyama.
